martes, 23 de abril de 2013

River festejó en Mendoza y sigue en los primeros puestos del campeonato

Martínez es interceptado por el ex River Nico Sánchez
Lanzini, de penal, y Balanta le dieron el triunfo al elenco de Ramón Díaz. Castillón había marcado la igualdad parcial para Godoy Cruz. El equipo de Núñez quedó a dos puntos del líder Newell's.

En la primera etapa la iniciativa fue de Godoy Cruz, que se mostró más decidido y metido en el cotejo ante un River estático con poca movilidad.
La clave del local estuvo en mediocampo con la tarea de Gonzalo Castellani y José Luis Fernández, quienes se le sumaron las apariciones esporádicas de David Ramírez, el conductor del conjunto dirigido por Martín Palermo.
A los 13m. hubo un centro desde la izquierda de Fernández y un error defensivo de River que posibilitó un derechazo de Castillón, que se fue rozando el palo derecho.
Luego hubo un desborde del propio Castillón, el más peligroso de la cancha, que cortó Marcelo Barovero.
La pasividad de River estuvo en el mediocampo y esto dejaba separado del resto de su equipo a Juan Manuel Iturbe, el más molestó a la defensa mendocina por su velocidad, y Carlos Luna.
Sin embargo, a los 29m. hubo un pase forzado de Iturbe y un error de Nicolás Sánchez que perdió el balón con Luna y lo derribó en el borde área, que el árbitro Néstor Pitana vio adentro y cobró penal.
Así, desde los doce pasos, Lanzini con un tiro al palo derecho superó a Nelson Ibáñez, quien se arrojó al otro lado, y anotó la apertura del marcador.
Pero dos minutos más tarde hubo una asistencia de Ramírez, quien aprovechó el mal achique de la defensa de River, para un solitario Castillón que definió con disparo bajo ante la salida de Barovero.
Esto puso algo de justicia, porque el local había hecho la mayoría del gasto del partido ante un rival que no pudo hacer pie en un trámite desfavorable.
El segundo tiempo se presentó con las mismas características y una tapada de Barovero le impidió el gol a Mauro Obolo.
Pero el visitante comenzó a despertar de su letargo y a disputar el dominio al local.
Encima a los 8m. hubo un error de cálculo de Ibáñez ante un centro de Carlos Sánchez y el juvenil colombiano Alvarez Balanta se encontró con el ´regalo´ y con un toque cortó marcó el 2-1.
Con la ventaja a favor el equipo de Ramón Díaz comenzó a justificar el triunfo a través de la velocidad de Iturbe, quien complicó al fondo local y recibió un duro trato de parte de los jugadores mendocinos.
Una corrida del juvenil, ex Porto, derivó en Luna y este tocó para Lanzini que definió, pero Ibáñez tapó el tiro bajo del conductor ´millonario´.
El partido se hizo de ida y vuelta, aunque el local ya no estaba tan lúcido como en la primera etapa y sufrió los contraataques de River como cuando el ex Tigre le cedió al ingresado Rodrigo Mora y tapó Ibáñez y luego con una jugada propia que tiró por arriba desde buena posición.
Pese a los seis minutos adicionados por Pitana, de floja labor -no sólo por el penal mal cobrado, sino que debió expulsar a Leandro Grimi por un foul a Iturbe-, el visitante lo controló bien y se llevó una justa victoria, que se justificó por lo hecho en el segundo tiempo.

Fuente: Telam


Fuente: Olé

lunes, 15 de abril de 2013

Lo dejó en Banda

Funes Mori aguanta la embestida de López y marca el empate
River empató 1-1 con Arsenal y perdió terreno en la lucha por el Torneo Final. Ahora, quedó a cuatro puntos de Lanús y, encima, tendrá muchas bajas para el partido con Godoy Cruz: Ponzio, Vangioni y Funes Mori.

Había ganado Lanús y River salía al campo de juego con una única premisa: vencer a Arsenal para no quedar demasiado relegado en la lucha por el Torneo Final. Sin embargo, en el Monumental se evidenció la diferencia entre el Granate y el Millo: el equipo de Guillermo pudo ganarlo en el final; el de Ramón no encontró la forma para sumar los tres puntos en un segundo tiempo desprolijo y con pocas emociones.
La primera parte fue la antítesis de la segunda. Con River apostando a la tenencia de pelota, al buen manejo por medio de sus volantes. Arsenal, por su parte, esperaba agazapado para una contra. Así, llegó el gol de Benedetto, quien la mandó a guardar después de una buena jugada de Damián Pérez por la izquierda. Pese a esto, el Millo no resignó su cómo y una gran asistencia de Ariel Rojas le permitió a Funes Mori estampar la igualdad.
Sobre el final de esos 45' iniciales sucedería una de las claves del encuentro. Leo Ponzio tuvo que salir lesionado y, a partir de ahí, el equipo de Ramón no fue el mismo. River empezó a perder posesión de balón y a verse complicado con Benedetto (desperdició una situación inmejorable) y Carbonero. El ingreso de Mora e Iturbe fue un intento de obtener más punch en ataque y, si bien el uruguayo generó algo, el resultado no sufrió modificaciones.
El Arse rescató un punto; el Millo dejó porotos importantes en el camino, ya que quedó a cuatro de Lanús. Y, encima, el Pelado deberá pensar en las bajas que tiene para visitar a Godoy Cruz en Mendoza (además de Ponzio, Funes Mori y Vangioni llegaron a la quinta amarilla). Lo dejó en Banda...

Fuente: Olé


Fuente: Olé

miércoles, 10 de abril de 2013

Una sana costumbre, ganarle a Racing

Lanzini autor del segundo gol festeja con González Pires autor del primero
07.04.2013 | River Plate retornó a la senda triunfal al vencer como visitante por 2 a 0 a Racing en el clásico.

Los goles del equipo “millonario” fueron marcados por el defensor Leandro González Pirez, a los 11 del primer tiempo, mientras que Manuel Lanzini, a los 44 del complemento, cerró la cuenta. El conjunto dirigido por Ramón Díaz consiguió así su quinta victoria en el certamen, mientras que los conducidos por Luis Zubeldía acumulan su tercera derrota en el torneo. River empezó siendo más duro en el mediocampo, apretando en cada sector y desprendiendo a Vangioni por izquierda y Mercado por derecha, siendo Lanzini el creador de juego. Racing se mostró superado en esos minutos, porque Bolatti estaba demasiado solo para la recuperación en el medio, y por ende perdía ante le mediojuego “millonario”.

Sobre los 11, y en una pelota parada, River llegó al gol cuando un córner de Lanzini desde la derecha lo conectó de manera impecable el juvenil González Pirez, que colocó el balón lejos del alcance de Saja. El partido se hizo atractivo, porque ambos equipos se predispusieron para el ataque, a veces con errores propios y también ajenos. A River lo guió Lanzini, mientras que Fariña optó por ser la carta de ataque de Racing, dado que De Paul
estuvo demasiado intermitente. En el minuto 26 Vietto escapó por derecha, pero el balón le quedó a De Paul y el
remate se fue por encima del horizontal, pero la respuesta de River llegó a los 39 cuando Mercado habilitó a Funes Mori y luego le quedó a Luna, pero el remate lo contuvo Saja.

Para el complemento las acciones continuaron siendo abiertas e inquietantes, con un River algo más incisivo, pero que no podía resolver las acciones que tuvo a su favor, en gran parte con la ayuda del mediocampo de Racing, pero esas falencias fueron bien subsanadas por la defensa local. A los 16 escapó Luna por derecha, envió el balón a Funes Mori, quien no pudo definir, y el rebote le quedó a Sánchez, pero su remate se fue por encima del travesaño. Racing volvió a hacer pie en el partido, porque Zubeldía mandó a Villar por Pillud y le dio más oxígeno al ataque de su equipo por la derecha, donde Vangioni -en River- debió salir por lesión. Así fue
que a los 25 la “Academia” casi lo empata con un tremendo cabezazo de Zuculini que dio en el travesaño de un Barovero ya vencido.

Racing se fue decidido a buscar el empate, a veces con buenas armas y en otras algo desprolijo, pero chocó contra una defensa “millonaria” bien plantada, en donde el debutante colombiano Alvarez Balanta fue una figura excluyente. Jugado en ataque Racing fue a buscar el empate y cometió un grosero error en el final, cuando Zuculini jugó mal una pelota y se la dejó a Lanzini para un contragolpe de “uno contra uno”, en el minuto final. El
joven jugador de River dejó atrás la marca de Zuculini, y encaró a Saja, para eludirlo y marcar el 2 a 0 definitivo.


Fuente: Olé

viernes, 5 de abril de 2013

River - Vélez en cero

Mora, en el medio, un delantero que no lastimó
(Jugado el sábado 30 de marzo) El equipo de Ramón Díaz todavía no vuelve a su mejor versión del comienzo del certamen; empató 0-0 ante el último campeón, en un aburrido encuentro. 

¿Con el verano se fue también el River que insinuaba una imagen mucho más radiante y luminosa respecto de lo que venía siendo su extendido invierno futbolístico? La pregunta queda flotando, con el riesgo de que en el futuro tenga una respuesta afirmativa si se mantienen las últimas señales. Después de los triunfos en las tres primeras fechas, conseguidos a golpes de arrebatos en medio de partidos de incierto destino, River obtuvo cuatro de los últimos 12 puntos. Y en tres de esos encuentros no hizo goles. El equipo entró en una meseta que se parece mucho a la intrascendencia, a la incapacidad para convertirse en un real animador del torneo.

El 0-0 ante Vélez aún es insuficiente para que entre los hinchas cunda el desánimo que los agobió en los últimos tiempos, pero lo obliga a revisar si el entusiasmo estival que trajo Ramón Díaz es tan fuerte y durarero como creyeron en un principio. El Pelado dispuso para ayer el esquema más conservador desde que asumió. Insatisfecho con Mauro Díaz y Lanzini, y aún no decidido a apostar por el pibe Tomás Martínez, el DT abolió el puesto de enganche y armó un 4-4-2. Pero más que el planteo, lo que habló por River fue una actitud cautelosa, sin la ambición suficiente para ir a buscar el éxito.

A la falta de confianza y determinación le sumó un serio déficit de juego. Este River no tuvo recursos para armar una combinación asociada, con cinco pases seguidos, con alguna muestra de creatividad o talento. Fue un equipo plano, sin sorpresa. Las carencias empiezan desde atrás. No tiene un jugador para darle una salida limpia a la pelota, para dar ese primer pase que clarifica. Los zagueros centrales se complican hasta para despejar la pelota. El horizonte de Mercado es corto y el pibe Martínez volvió con las mismas limitaciones técnicas con que había salido de la formación titular.
Así están las posiciones en el torneo Final

Y eso que River tuvo la ventaja de enfrentar a este Vélez que tiene puesto más de un ojo en la Libertadores. Aprovechó la visita al Monumental para que Pratto y Cerro fueran retomando ritmo tras recuperarse de sendas lesiones. Jugaron un poco más de una hora y fueron reemplazados en función del encuentro del martes contra Iquique.

Aun sin estar en sus mejores días, Vélez es un equipo reconocible en su buen trato de la pelota y un funcionamiento que lo hace temible para cualquier rival. Y River le tuvo mucho respeto y consideración. Se le animó poco y con escasísimas ideas. Extremó las precauciones cuando en el segundo tiempo Ramón Díaz ubicó a Mora por la derecha (Sánchez se cerró y casi se encimaba con Ponzio) para evitar las proyecciones de Papa. Trezeguet no debe haber tocado más de tres pelotas. Ni siquiera fue ese delantero que retrocedía para hacer de pivote y tocar de primera a los costados para darle apertura a los avances.

River atacó con pelotazos cruzados que por lo general se convertían en centros pasados, sin destinatarios, salvo a los 3 minutos, cuando un tiro de Mercado fue conectado en el lado opuesto por Vangioni y Domínguez se interpuso en la definición. Los delanteros de River no tuvieron situaciones de gol. Tampoco hay quien construya juego desde el medio. Ponzio muchas veces agarra la lanza en ese páramo y va al frente, pero con poco criterio y sin ser dueño de ese pase que limpia la jugada. Vangioni, ayer sin tantas obligaciones para regresar, le dio trabajo a Peruzzi y fue una de las pocas vías de profundidad.

Al margen de la invisibilidad de Trezeguet, Mora apenas si se aproximó con un par de remates de media distancia. Se cambió el tándem ofensivo con los ingresos de Iturbe y Luna. El juvenil agacha la cabeza y encara, no maneja ningún concepto colectivo. Tuvo un par de acelerada que terminaron en choques frontales.

Si a River no le sobró decisión, Vélez tampoco anduvo sobrado de audacia para explorar las limitaciones locales. Insúa mostró destellos con su toque y cambio de ritmo, y estuvo cerca del gol en un par de ocasiones, pero la conexión con Copete y Pratto fue imprecisa en los últimos 30 metros.

El partido se encaminó irremediablemente al 0-0. El River encendido del verano se está apagando. Así de tibio no va a llegar muy lejos.
 
1. La quinta amarilla. River y Vélez perderán jugadores para sus próximos partidos por haber llegado al límite de las amonestaciones. En el conjunto millonario, ni Ponzio ni Bottinelli estarán en el clásico con Racing, mientras que Lucas Romero se perderá el duelo entre Vélez y San Lorenzo.
 
2. Sabella, con Passarella. El seleccionador nacional, Alejandro Sabella, estuvo ayer en el Monumental mirando el partido en uno de los palcos junto con el presidente de River, Daniel Passarella.
 
3. No puede con Vélez. River acumula cuatro encuentros sin poder derrotar al conjunto de Liniers. El último éxito millonario fue en el Clausura 2010 por 2-1.

Otra vez la violencia. Antes del encuentro, un hincha de River hirió a otros dos en la estación Scalibrini Ortiz, del Belgrano Norte, frente al estadio. El agresor fue detenido. Además, también hubo dos policías levemente heridos por un enfrentamiento con hinchas de Vélez.



Fuente: Olé